Historia DIM 

 

 

El Deportivo Independiente Medellín, nació el 15 de abril de 1.914.Su principal gestor fue don Alberto Uribe Piedrahita quien acompañado por los mejores elementos de la sociedad de Medellín de entonces, hicieron realidad su viejo sueño.

Los Tenientes Enrique Cubillos, Lorenzo García y Roberto Echavarría, Enrique Villa Restrepo, Jorge Bachman, Rafael, y Luis Uribe Piedrahita, Manuel Santamaría, Carlos, Juan y Germán Gómez Q., José Luis Restrepo, Martín y Hernando del Corral, Gustavo Correa, Alberto Lince, Jesús Echeverry D., José Restrepo V., Guillermo Greiffenstein, integraron también aquel equipo que con el paso del tiempo tuvo en sus filas otros personajes de la vida política y social de Antioquia.

Los baldíos y pastizales ubicados en lo que hoy es el centro de Medellín sirvieron como primeras canchas para el desarrollo de su fútbol y de la afición, mediante desafíos con otros equipos que también empezaban una historia similar.

El primer torneo que ganó el Medellín fue la ´Copa Jiménez Jaramillo´ en 1.923, luego, por su organización, el Medellín fue base de las representaciones antioqueñas y Olimpiadas y Campeonatos Nacionales.

Su más resonante éxito entonces fue el título del Campeonato nacional de 1938.

EL profesionalismo
El cuadro rojo de la Montaña ocupó en el primer Campeonato, el puesto 7 con 17 puntos a 10 del Santa Fé, Campeón del 48.

Ese Medellín todavía contaba en su plantilla con los viejos pioneros del fútbol antioqueño tales como Alberto ´General´ Villa, Manuel ´Carrunga´ Londoño, José ´Mico´ Zapata y Hernando Restrepo ´Placeres´.

DEPORTIVO INDEPENDIENTE MEDELLIN 1.950

Un equipo sólido comenzó a formarse en 1.949 con la llegada de los jugadores Peruanos, pero fue en 1.950 cuando alcanzó a brillar con todo su esplendor al complementarse el plantel conformado por 12 futbolistas incas de primera categoría, algunos de ellos triunfadores en el fútbol Argentino como ´Tito´ Drago y ´Titina´ Castillo.

La Danza del Sol, en pleno ´Dorado´ fue un equipo sensacional, la más brillante expresión del fútbol peruano en el exterior en toda su historia, solamente comparable con el glorioso Seleccionado Nacional que intervino en los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936 y el ´Rodillo Negro´ del Deportivo Cali en 1.949.

Superando apenas por el Campeón Deportes de Caldas, Millonarios y Deportivo Cali, el Medellín fue rival temido por la clase de sus jugadores y la calidad del fútbol practicado.

 

LO FUTBOLISTICO
La década no fue absolutamente mala en resultados pues en el comienzo hubo actuaciones muy valiosas, generadas por jugadores quizás menos ilustres que los de otras épocas, pero siempre imbuidos del espíritu luchador que ha distinguido la institución.

En la década aparecieron en filas hombres que calaron hondo en el sentimiento de la fanaticada: Luis Barbat y el ´Pibe´ Valderrama fueron insignias en la cruzada por conseguir los mejores resultados.

Quizás el recuerdo mayor, terrible en su momento pero hoy, una anécdota singular, es el de diciembre de 1.993 cuando por algunos minutos se estuvo en la antesala de la gloria y el título fue la tercera estrella en el escudo del Medellín.

Fue el instante alucinante de no saber donde está la dicha o donde se encuentra el infortunio, o si las lágrimas de emoción o pena tienen el mismo contenido.

Por fortuna, el pasado es pasado, lo malo ha quedado atrás superado por la fe de una fanaticada que no sabe de renuncias o de deslealtad y por unos dirigentes que le muestran a un país como se lucha por lo que se ama, porque Medellín es un sentimiento que vive permanentemente a flor de piel.